La civilización es un convenio, por tanto, es factible cambiarlo si nos parece necesario. En el libro de la Recivilizacion argumento por qué hay que cambiarlo y por qué no lo estamos cambiando. Muchos desafíos que resultan de no hablar claro. Muchas zancadillas que nos autoinfligimos como la hipocresía, el negacionismo, la presión del egoísmo, el circulo del milagro o la huida hacia adelante. En la Recivilizacion hay cabida para pensar qué podemos hacer, como contribuir al cambio. Y todo empieza por los cuidados, a uno mismo y a los demás. Acabar con tanta guerra y conflicto oculto, latente, implícito, que bloquea la mejor versión de tanta gente como hay en el mundo.
Tenemos un mundo muy mejorable. Pero parecería que no queremos hacer nada al respecto. En la Recivilización araño las emociones en busca de la motivación para ponerlo todo patas arriba.
"Ha llegado el momento de hacer una tregua y poner patas arriba el modo en que hacemos las cosas" El mundo se enfrenta a una serie de desafíos interconectados, como el cambio climático, la desigualdad y la inestabilidad política. Estos desafíos están poniendo a prueba los límites de nuestro sistema actual y nos obligan a pensar en nuevas formas de vivir. Empezando por nuestra relación con la naturaleza.